Los experimentos revolucionarios de México

Los experimentos revolucionarios de México

Bajo la dictadura de Díaz, México llevó a cabo una rápida modernización impulsada por el crecimiento económico, la inversión extranjera y el desarrollo de la infraestructura. Conocidos como los científicos, la camarilla de Díaz priorizó el autoritarismo tecnocrático sobre el gobierno democrático. Aunque la modernización trajo beneficios económicos, también exacerbó las ya existentes desigualdades sociales. Con el apoyo de un poder judicial corrupto y de la violencia, las grandes haciendas deslindaron y enajenaron tierras indígenas de propiedad comunitaria. Los trabajadores sufrían malas condiciones en minas y fábricas. El descontento se extendió por toda la sociedad. El favoritismo del régimen hacia los intereses extranjeros alimentó aún más el resentimiento. A pesar de una oposición esporádica, como la formación del Partido Liberal Mexicano en 1900, la resistencia organizada siguió siendo limitada hasta la aparición de Madero, un rico terrateniente del norte de México.